Gellert Grindelwald fue un mago tenebroso anterior a Lord Voldemort. Es la version magica de Adolf Hitler. Se da a conocer en Harry Potter y la Piedra Filosofal cuando Harry lee sobre el cromo que le había tocado en las ranas de chocolate. En él se menciona que Albus Dumbledore es famoso por derrotarle en 1945. Vuelve a aparecer en el séptimo libro, donde se conoce que fue íntimo amigo de Albus Dumbledore durante el verano posterior a su expulsion de Durmstrang, una Escuela Mágica de Europa del este. Ambos planeaban hacerse con las Reliquias de la Muerte, sin embargo, la que más ansiaba él era la Varita de Sauco; conocida como la varita más poderosa que jamás había existido.
Al concluir ese verano, Grindelwald, Dumbledore y Aberforth, hermano menor de Albus, tuvieron una disputa sobre Ariana, la hermana de ambos. Tras ello se batieron en duelo y uno de los hechizos hirió de muerte a la chica. Grindelwald huyó y no se volvió a encontrar con su amigo hasta muchos años más tarde, cuando estalló su famoso enfrentamiento.
Durante años extiende el mal por toda Europa dándose a conocer como el mago más tenebroso de su siglo. Años más tarde, sería desbancado de ese puesto por Lord Voldemort.
Al caer derrotado en 1945, justo al final de la Segunda Guerra Mundial, pierde la varita de Sauco (se hizo con ella en algún momento de su vida, cuando la robó a Gregorovich, el fabricante de varitas del norte de Europa) pues su lealtad está de parte de Dumbledore y es enviado a Numengard, una prisión mágica que él mismo había construido para encerrar a sus opositores, con un sorprendente parecido a Auschwitz (la diferencia es que donde en Auschwitz pone "El trabajo os hara libres" el ha puesto "Por el bien de todos").
Cincuenta y dos años más tarde, es asesinado por Lord Voldemort en su propia celda, puesto que éste buscaba, como Grindelwald en su juventud, la Varita de Sauco. Dicen que se arrepintió de sus actos durante su estancia en Numengard.
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