Esta criatura pertenecía a la familia Black y habitaba en la casa de Sirius Black, su amo. Este elfo doméstico siente un profundo desprecio hacia las personas de sangre mestiza (uno de los progenitores mágico y el otro muggle) y hacia los muggles, así como hacia los llamados traidores de sangre (magos de progenitores magos, amigos de los muggles), como la familia Weasley; mientras que admira profundamente a las personas de sangre mágica pura como los Black (aunque odiaba a Sirius por pertenecer a Gryffindor, en lugar de seguir la tradición familiar de estar en Slytherin) y Malfoy principalmente. Por lo tanto, sintió desprecio hacia Hermione Granger, a pesar de que ella se había preocupado de que Kreacher viviera en mejores condiciones.
Al morir Sirius, correspondía que el heredero fuera el siguiente miembro de la familia Black vivo. Como Sirius y Regulus murieron sin dejar descendencia, correspondería la herencia a su prima Bellatrix Lestrange, pero Sirius decide que su querido ahijado Harry Potter se quede con todas sus pertenencias, incluyendo a Kreacher, quien, al contrario de Dobby, detestaba a Harry y adoraba a Bellatrix. En el último libro Harry para ganarse su confianza le regala un falso guardapelo (un horrocrux falso), propiedad de su antiguo amo Regulus al que le tenía un gran aprecio, y Kreacher los empieza a tratar bien. Harry, al hacerse cargo de Kreacher, después de unos incidentes lo envía a trabajar junto a otros elfos domésticos a Hogwarts.
En Hogwarts, Kreacher conoce a Dobby, y ambos se ponen al servicio de Harry para espiar a Draco Malfoy, aunque Kreacher lo hace a regañadientes, quien está oculto en la Sala de los Menesteres, con el propósito de reparar el Armario Evanescente para que los mortífagos puedan entrar y atacar Hogwarts, con tal de asesinar a Albus Dumbledore. Kreacher ayuda poco y por insultar a su amo, Dobby se pelea a menudo con Kreacher.
Hubo un tiempo en que Lord Voldemort, cuando estaba creando sus horrocruxes, quería probar la seguridad preparada en una cueva para guardar uno de sus horrocrux, por lo que pidió a sus Mortífagos un elfo domestico. Regulus Arcturus Black, el hermano de Sirius, que por ese tiempo trabajaba a las órdenes de Voldemort, ofreció a Kreacher, así el Señor Oscuro lo llevó a la cueva y le hizo beber una poción que lo debilitaría, con la intención de que el bebedor no pudiera salir. Aunque la sala estaba preparada para que no se puediera aparecer o desaparecer de ella, Kreacher, al ser un elfo, no pudo fallar a la orden de su amo, la de volver a casa y logró salir. Kreacher fue con su amo Regulus y le relató lo que había ocurrido.
Regulus entonces fue con el elfo a la cueva y bebió la poción,le pide a Kreacher que cambie los relicarios y que se lleve el verdadero a su casa y que nunca le diga nada de lo sucedido a la Familia Black, Regulus muere atrapado por los Inferi que lo llevan al fondo del lago, y Kreacher regresa a casa e intenta abrir el relicario, pero sin obtener éxito; Kreacher nunca le dijo nada de lo ocurrido a la Familia Black.
Kreacher cuenta todo esto a Harry en el séptimo libro, y es entonces cuando Harry comprende las palabras de Dumbledore: Kreacher no traicionó a Sirius en el quinto libro, fue el mismo Sirius quien motivó que el elfo nunca lo respetara, ya que Sirius siempre lo vio como un ser inferior.
Kreacher lucha en la segunda batalla de Hogwarts, en contra de Lord Voldemort, armado con cuchillos y sartenes y liderando a los elfos domesticos del castillo, tratando de defender a su nuevo y querido amo Harry Potter y sus amigos.
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